martes, 2 de diciembre de 2008

el amor trunco lleno de colores con añoro de sonrisas y besos, pegoteado con el engrudo de las disidencias de los desencuentros y el ir y venir de las mañanas los soles y los vientos, a donde me llevan si la segundita que anuncia la cantante entre bombos es lo que deseo, lo quiero. un abrazo largo bien largo, y mis lágrimas llaman tu sonrisa, el que me esperes el darme cuenta lo pelotudo que me vuelvo a veces cuando no te sé leer y aun así te veo bailar a mi lado mi partenaire femenino, otra vez; me debería tocar a mi levantarte en andas por las plazas los barrios y los teatros; yo debería revolearte por el aire y atajarte entre mis brazo, dormirte despertarme entrecruzado, mezclados los dos indefensos.